VIOLENTA ESCALADA
Lo que sí es muy cierto es que cada vez más nos vamos quedado con menos espacios para la práctica de nuestro deporte llámese Montañismo o 
Escalada. En el entorno de la ciudad de Guadalajara tenemos la muestra de ello enumerando lugares como el Volcán de Tequila que actualmente es¡¡¡Propiedad Privada!!! Y qué decir de Cerro Viejo que cada vez más lo vemos depredado por intereses de personas con el respaldo y la participación de políticos que pretenden fraccionarlo; ir a escalar a Huaxtla, La Nueva Zona (El Escalón) o el Cuajo resulta arriesgado por la presencia de los chicos malos. Así con estos ejemplos se inicia una lista que resultaría interminable de escribir si anotáramos todos los acontecimientos de robos e incluso violaciones que han ido aconteciendo en el transcurso de los últimos 15 años en nuestras Montañas que debería de ser patrimonio de todos los mexicanos.
A continuación un articulo escrito por Reporte Indigo de Monterrey:
Las paredes naturales de Potrero Chico lucen desiertas, muy distintas a como se veían hace un par de años cuando la vista dominguera era de cuerpos trepando por la piedra.
En este otoño, Hidalgo Nuevo León presenta menos del 10 por ciento del turismo de otros años.
Sólo un par de grupos de escaladores se animan a conquistar las cimas que forman un círculo de paredes y simulan un potrero, pero no sólo por su grado de dificultad, sino por un nuevo temor: la violencia.
Las historias de falsos retenes, la toma de ranchos y posadas del sitio por parte de criminales, se mezclan con las de abusos del Ejército, humillaciones y hasta amenazas innecesarias de policías municipales.
Y es que a la salida de Escobedo rumbo a Hidalgo hay un retén de la Policía Federal.
Es justo donde apenas a inicios de octubre en 
operativos de Fuerza Civil y militares fueron capturados 12 policías de Hidalgo, el municipio donde está el Potrero Chico, y otros 11 de la localidad aledaña El Carmen.
Algunos de ellos confesaron trabajar para el crimen organizado.
No hay confianza en la policía local. Pero tampoco en la milicia.
Porque algunos escaladores que todavía asisten a Potrero Chico dieron su testimonio de manera anónima ante las cámaras de Reporte Indigo Monterrey.
Y los entrevistados dijeron recibir abusos y trato prepotente de militares y policías que han hecho cateos y detenciones arbitrarias en Hidalgo.
De nuevo es una situación donde los civiles quedan en medio, en el fuego cruzado de la guerra contra el narcotráfico, entre la violencia de los criminales y los abusos de las autoridades.
El miedo se percibe en las quintas y en las posadas de los alrededores, donde antes se hospedaban cientos de visitantes de varios países.
A pesar de esto, la Corporación Para el Desarrollo Turístico Nuevo León promueve en su guía para turistas Pocketmag a Potrero Chico como “un centro recreativo de diversión familiar”.
Como si nada estuviera ocurriendo con la violencia en ese lugar.
Y es que en 2004 para estas fechas la zona estaba repleta, llegaban hasta 700 extranjeros, el año pasado fueron apenas 50.
Ahora en las desoladas calles del municipio de Hidalgo los domingos son distintos: en vez de familias y escaladores se ven grupos de jóvenes con aspecto de pandilleros pero con autos de lujo. El olor a marihuana impregna el paseo de escaleras que asciende al Cañón de la Virgen.
Las latas de cerveza adornan el paisaje del Parque Natural Potrero Chico. Antes de ingresar se puede ver una pequeña cueva que sirve de altar para la imagen de la Santa Muerte.
Dos mujeres cuidan la entrada del parque, ninguna autoridad civil ni militar patrulla los alrededores.
-Señora, ¿no han venido aquellos?
-Pues ahí entran de unos y de otros, una no los puede distinguir, pero aquí estamos nosotras solas y ya ve que no pasa nada-.
Aunque los dueños de las posadas afirman que la presencia de sicarios o criminales en las zonas son puros rumores, varios restaurantes de Hidalgo mantienen sus cortinas abajo porque ya no pudieron pagar el derecho de piso.
Zona de escalada con fama mundial.
Articulo tomado de: www.reporteindigo.com/monterrey