La actividad en el Everest lleva ya unos días a ritmo frenético, especialmente a cargo de los Doctores de la Cascada trazando la ruta por la Cascada de Hielo del Khumbu y de los sherpas de las diversas  expediciones comenzando a fijar las cuerdas en los primeros campamentos de altura. Su objetivo es disponer cuanto antes de la ruta fijada hasta la cumbre para poder aprovechar la ventana de buen tiempo en cuanto se presente y llevar al gran número de personas que ya se concentran en el campo base hasta la ansiada cima.

Mientras tanto, dos expediciones generan esta primavera una expectación especial, debido a que comparten el objetivo de abrir sendas rutas en estilo alpino al techo del mundo. Por un lado, el ruso Alexey Bolotov y el kazajo Denis Urubko, y por el otro el italiano Simone Moro y el suizo Ueli Steck. Por el contrario, la tercera cordada que se había planteado el mismo objetivo, formada por los rusos Gleb Sokolov y Alexander Kirikov, finalmente ha aplazado su expedición por falta de apoyos.

Fase de aclimatación

Ambas expediciones ya se encuentran en el Everest, en plena fase de aclimatación, imprescindible para llevar a cabo sus objetivos. Alexey Bolotov y Denis Urubko partieron el 20 de marzo de Moscú y, de camino al campo base del Everest, ya han realizado varias ascensiones a alturas cada vez mayores para ir ganando aclimatación.

La semana pasada, los dos alpinistas forzaron la máquina para subir hasta los 7.000 metros y desde el sábado se encuentran ya en el campo base del Everest. Ahora, su objetivo es completar la última fase de su aclimatación en la arista oeste de la montaña, para ascender hasta los 8.000 metros. Una vez lo hayan logrado, consideran que estarán listos para llevar a cabo su plan de abrir un nuevo itinerario en la cara suroeste.

Mientras tanto, Ueli Steck y Simone Moro, por su parte, también han llegado al campo base del Everest en los últimos días y han empezado la tarea de aclimatación en la montaña. Según revela el propio Ueli Steck en su blog, tanto él como Simone Moro habían alcanzado este lunes 15 de abril el C2 (6.500 m) de la ruta normal de la cara sur, “un punto importante parala aclimatación”, apostilla. Su idea sería pasar allí la noche y descender de nuevo al campo base para acometer en próximos días una nueva punta de altura.

Avalancha

Precisamente un tramo por debajo de ese C2, en el denominado Valle del Silencio, se originaba ayer una avalancha que afortunadamente no provocaba víctimas ni heridos, según se podía leer en el blog de Chris Jensen Burke. El recorrido de la avalancha fue hacia la pared del Nuptse entre el citado C2 y el C1, un tramo de la ruta que en esos momentos no era recorrido por nadie, aunque alguna expedición la veía de cerca.

Según analiza Alan Arnette, que realiza un exhaustivo seguimiento de la temporada en el Everest desde el campo base, “la preocupación real en este momento para los alpinistas es la cantidad de nieve depositada en el Everest este invierno”.